Especial Slasher: El género que marcó una década (1980-1990)

Maniáticos, armas filosas y chicas sobrevivientes fueron las constantes de este subgénero, que se tradujo en éxitos de taquilla e innumerables secuelas.



Con la llegada de la década de 1980, el cine vivía sus primeros blockbusters y la nueva generación de directores encabezada por Steven Spielberg, Martin Scorsese y Francis Ford Coppola gozaban las mieles del éxito. Por su parte el horror era el patito feo, visto como un género sin inclinación artística, barato y hasta vulgar. Pero gracias al slasher aportó ganancias millonarias que otras películas ya hubieran querido.


Tráiler
Friday The 13th

LA SUERTE DE LAS "MALAS", LAS BUENAS LA DESEAN
Si en 1978 "Halloween" asustó a toda una generación gracias a su atmósfera y suspenso, además de dar a luz al primer icono del cine de horror moderno, "Friday The 13th" (Sean S. Cunningham, 1980) aprovechó el momento para convertirse en uno de los filmes independientes más redituables de la historia.

Siguió la tendencia de situar la trama en un día significativo o festivo, concepto que se expandió a aniversarios o fechas conmemorativas. También agregó un sentido trágico a su personaje detonante, Jason Voorhees y a su madre Pamela, por quienes se llega a sentir lástima y hasta empatía.

Recopilación
Tráilers de los slashers de 1980

EL BOOM DEL SUBGÉNERO
"Viernes 13" y "Halloween" fueron éxitos de taquilla y como suele suceder, una buena idea se convierte en una institución de la cual todos quieren sacar provecho. Se vino entonces una oleada de cintas que buscaron subirse al tren de su éxito dando paso a filmes como "Final Exam", "Prom Night", "Return To Horror High", "Sleepaway Camp" y una larga columna de títulos que sería imposible abarcar no todos pero sí los más distintivos. En vez de hacer un recuento de ellos, haremos un repaso de sus características, ya que todos se apegan a una fórmula sencilla que se convirtió en el molde a seguir.

Tráiler
Return To Horror High (1987)

CARACTERÍSTICAS DE UN FILME SLASHER
1) Los miembros de un grupo de chicos son eliminados hasta quedar una sola sobreviviente (la final girl), que enfrentaba al psicópata en cuestión; ella podía teminar acompañada o no.

Clip
Las muertes de "Happy Birthday To Me" (1981)

2) La primera parte de la historia estaba llena de suspenso para luego mostrar elaboradas y exageradas escenas de muerte, lo que daba rienda suelta a la creatividad de escritores y directores.

Clip
Friday The 13th Part V: A New Beginning (1985)
"Encontrando cuerpos"

3) Dentro de la inevitable persecución, siempre había alguien (por lo general la final girl) que descubría los cuerpos de sus compañeros en una secuencia conocida como "body count".

Tráiler
My Bloody Valentine

4) El psicópata podía o no llevar máscara, pero este elemento, retomado del Giallo italiano, era un "must have" para darle identidad a él y a la cinta, misma función tenía el arma utilizada.


CLICHÉS JUVENILES
De igual modo atrás quedaban los protagonistas que desempeñaban papeles detectivescos o policiacos, al contrario, en un slasher cualquier autoridad es incompetente. Las estrellas pasaron a ser adolescentes inexpertos o novatos en la actuación que interpretaban a estudiantes con todo tipo de estereotipos: El atleta, el nerd, la popular, la chica promiscua, el bromista, etc. Por lo general consumían alcohol, drogas o tenían sexo ¡Pobre de quien lo hiciera! ya que era sinónimo de una muerte segura como castigo a su libertinaje.

Clip
The Funhouse (1981)
"¡Déjame ir!"

AHÍ VA MI HEROÍNA
Todos contrastaban con la figura de la final girl, una chica inocente, bien portada, cuya figura evoca a la leyenda medieval de la princesa virginal que tranquilizaba al unicornio, representado en el antagonista. En el fondo, un slasher es una historia de moralidad donde los mal portados reciben su castigo y los que "se portan bien" se salvan, aunque hubo sus excepciones.


CONTINUACIONES, PESADILLAS Y DECADENCIA
La explotación del cine slasher se vio intensificada con el fenómeno de la "secuelitis": si la primera entrega fue un éxito, ¿Por qué no debería serlo también la segunda, la tercera o la quinta? Esto dio pie a que el villano en cuestión adoptara una imagen prácticamente indestructible e invencible para ser resucitado en la siguiente película. Fue precisamente esa serie de continuaciones la que poco a poco desgastó el subgénero, hasta que Wes Craven le dio un giro sobrenatural con "A Nightmare On Elm Street" (1984) y su antagonista Freddy Krueger.


Pero ni cuatro secuelas de Freddy en cinco años, ni el surgimiento en 1988 de Chucky, el muñeco diabólico como otro personaje distintivo del cine de horror, lograron mantener una veta que no era más atractiva para la audiencia. Esta prefirió voltear hacia un terror que empezó a contar historias más complejas, con actuaciones que llevaron al género a codearse con la crema y nata de Hollywood hasta alcanzar el reconocimiento artístico que siempre se le había negado.

Tráiler
He Knows You're Alone (1981)


¿EL FIN?
Así como llegó, el furor del slasher se extinguió hasta que nuevamente Wes Craven le dio un nuevo aire a finales de los 90 con "Scream". Pero los años 80 serán recordados como la era dorada de un subgénero que no buscaba hacer apología de la violencia, denigrar a la mujer o cosificar a un individuo, simplemente se convirtió en un modo de entretenimiento donde se ponía al espectador en una situación extrema, como un paseo en montaña rusa sin moverse del asiento.
Cierto, reflejaba los excesos y libertinaje de su tiempo, pero ultimadamente es la misma audiencia quien decide si portarse como uno de los tantos personajes disolutos, o como el psicópata enmascarado o el sobreviviente de la película. Además, como dice el sheriff Brackett en "Halloween":



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