Director: Ali Abbasi
Fecha de estreno: Cannes 2022 (pendiente aún en otros países)
Reparto: Zar Amir-Ebrahimi, Mehdi Bajestani, Arash Ashtiani, Forouzan Jamshidnejad, Mesbah Taleb, Alice Rahimi, Sara Fazilat, Sina Parvaneh y Nima Akbarpour.
Duración: 117 minutos.
Sinopsis
Es el 2001 y en Irán, en la ciudad santa de Mashhad se están dando una serie de feminicidios sin que las autoridades muevan un dedo. Una periodista de Teherán decide sumergirse en los peores barrios de esta ciudad para conseguir más información acerca de lo que parece ser el trabajo de un solo hombre, uno que asegura estar purificando la ciudad al sólo atacar prostitutas.
Durante el estreno de esta película en el festival de Cannes, algunos miembros de la audiencia se tuvieron que retirar, debido a la crudeza de algunas de las escenas, en las que la violencia gráfica alcanza niveles muy altos.
Con esto en mente y sabiendo que el tema central de esta película son una serie de feminicidios, podríamos suponer que es un thriller más, con el respectivo asesino de turno sangriento y brutal a más no poder, pero es mucho más que eso.
Y es que, los asesinatos se están dando en uno de los países más extremistas en cuanto a religión y tradiciones machistas se trata. Siendo el año 2001, en el que todo sucede, nos hace recordar el duro contexto en el que nos situamos, ya que es el mismo año del trágico 11-S y lo podemos notar en la tensión constante entre las autoridades con las que se topará nuestro personaje principal.
Hablar de las autoridades es un tema aparte, ya que aquí nos damos cuenta rápidamente de por qué parecen mirar a otro lado cuando se trata de ignorar esta ola de asesinatos. Al ser una película probablemente basada en hechos reales, es duro ser testigos de la impunidad que recubren este tipo de actos en esta película-denuncia de lo que es una realidad que aún se da en la actualidad.
Este potente thriller nos mantendrá en constante tensión debido a su dura temática, pero el poder verlo es una oportunidad que no se puede dejar pasar, ya que eso es lo bello del cine, no sólo nos entretiene, sino que también nos abre los ojos ante realidades que debemos ir eliminando de a pocos.
