No hay edad para provocar el miedo y tras su inocencia, un infante es capaz de los peores actos.
"Y en el espantoso silencio de la casa, mientras seguía sentado en la cama, impotente, con el rostro oculto entre las manos, oyó la risa aguda, dulce, maligna de un niño".
Stephen King en "Salem's Lot"
Una de las frases más conocidas de Alfred Hitchcock es la que asegura: "Nunca trabajes ni con niños, ni con animales ni con Charles Laughton", refiriéndose al actor y director reconocido por su intensa implicación en el trabajo. Pero en esta ocasión no se cuestionará el desempeño de su colega y el papel de los animales en el cine de horror es algo que ya hemos platicado, así que ahora los niños, esos pequeños bajitos como les llama el cantautor catalán Joan Manuel Serrat en una de sus canciones, son el tema a tratar.
Uno de los primeros actores infantiles fue Jackie Coogan, quien a los 6 años se robó la atención de críticos y el corazón del público con su participación en el primer largometraje de Charles Chaplin "The Kid" (1921); digamos que su intervención fue "espontánea" porque era un personaje que requería el guion. Años más tarde, gracias al Star System de Hollywood, llegaron niños actores como Shirley Temple, Roddy McDowall y Dean Stockwell.
Clip "The Babadook" (Jennifer Kent, 2012)
"¡¿No puedes ser normal?!"
Pero era difícil ver actuando a un niño en películas de terror y cuando salía era una especie de alivio cómico o en un papel intrascendente. Con el tiempo el cine de miedo se ha inclinado a mostrar tres tipos de niños: los que tienen mentalidad y comportamiento inestable, los poseedores de una naturaleza maligna o los asediados por fuerzas sobrenaturales.
Tráiler "The Bad Seed"
MALILLOS DESDE CHIQUILLOS
A los 11 años Patty McCormack hizo de Rhoda Penmark en "The Bad Seed" (1956), película dirigida por Mervyn LeRoy basada en una obra teatral que a su vez tomó inspiración de la novela del mismo nombre escrita por William March.
Su personaje tiene 8 años, ama a sus padres, es buena estudiante... y su madre sospecha que es una asesina.
Clip "¡Dame esos zapatos!"
El propósito de la obra es cuestionar la naturaleza del mal ¿El individuo nace malo o se hace malo? Rhoda se convirtió en el modelo a seguir de la criatura perturbada, con tendencias psicópatas, manipuladora y mentirosa. Apesar que la cinta tiene secuencias largas que remiten a sus orígenes, posee un final inesperado.
Clip "¡Debí haberlo sabido!"
El reparto, aunque exagera su interpretación, brinda las actuaciones memorables de Patty McCormack, Nancy Kelly como la atribulada madre de Rhoda y Eileen Heckart como la deshecha mamá de un compañero de escuela de la niña; las tres recibieron nominaciones al Oscar y Globo de Oro, siendo Heckart quien se llevó este último.
"The Bad Seed" también fue considerada como Mejor Película y es un exquisito thriller psicológico que merece verse.
Los personajes de Todd Bowden y Kevin Khatchadourian, interpretados respectivamente por Brad Renfro (RIP) y el ahora problemático Ezra "The Flash" Miller entran también en ese modelo del joven desquiciado y de naturaleza perversa.
Tráiler "Apt Pupil"
Todd, obsesionado con el Holocausto Judío, se relaciona con un criminal de guerra nazi (Ian McKellen) en "Apt Pupil" (Bryan Singer, 1998), adaptada de la novela de Stephen King, mientras que Kevin debe responder ante su madre por los horrores que ha cometido en "We Need to Talk About Kevin" (Lynne Ramsay, 2011).
Mención aparte merecen Michael Myers y Jason Voorhees, quienes antes de volverse iconos del horror con cualidades sobrenaturales acabaron sumidos en la locura y la sed de sangre. El primero estaba perturbado desde pequeño; "nació malo" da a entender el doctor Loomis en su famoso discurso sobre los ojos negros y mirada vacía.
Clip "Friday The 13th"
"Su nombre era Jason..."
Jason Voorhees es la venganza, un niño especial que sufrió por el abuso de los otros chicos y la negligencia de sus cuidadores. Es el personaje ausente en la primera entrega de "Friday The 13th" (Sean S. Cunningham, 1980), pero en la secuela es una auténtica furia de venganza contra quienes se atrevan a poner un pie en Cristal Lake.
Tráiler "Village of The Damned"
CHAMACOS DE OTRO MUNDO
En 1960 se estrenó "Village of The Damned", cuyo argumento se basa en la novela "The Midwitch Cukoos" de John Wyndham, considerado el escritor británico de ciencia ficción más importante después de H. G. Wells. Sobra decir que es un clásico de culto y se identifica con solo ver la imagen de sus niños con ojos brillantes, pelo rubio casi albino y que hasta ha sido parodiada en "Los Simpson". Aunque imponen con su aspecto, son sus habilidades mentales las que provocan miedo a los habitantes de Midwitch, donde viven.
Clip "Un niño sin emociones"
No importa que muestren una incómoda madurez, que sean pulcros, estudiosos o bien portados (¿Qué padre de familia no desea un hijo asi?), la gente les teme porque se descubre su origen extraterrestre, poseen una vibra extraña y, retomando con efectividad la carencia de sentimientos y emociones mostrada por Don Siegel en su "Invasion of the Body Snatchers" (1956), no poseen sentimientos; todo eso los vuelve intimidantes.
La película parece tener como trasfondo un discurso contra la discriminación, la intolerancia y la brecha generacional ¿A cuántos no nos señalaron por la forma de vestir, gusto musical o apariencia? Como siempre, se critica el miedo a lo desconocido, a lo que no entra en el esquema de "normalidad".
"Village..." explora el suspenso (con un clímax formidable, por cierto), pero "Children Of The Damned" (1964), su secuela espiritual, carece de la tensión y temas de su predecesora.
Clip "Village of The Damned" (1995)
"Niños infernales"
Todo lo contrario en el remake de John Carpenter de 1995, que para seguir con la injusta costumbre recibió reseñas negativas, pero el realizador respetó la esencia de la historia original y le agregó elementos de horror así como un final menos pesimista; en estos tiempos de reivindicación bien merecería ser revalorada.
Tráiler "Brightburn"
Hace unos años "Brightburn" (David Yarovesky, 2019) reinterpretó el mito de Superman: Brandon es un niño de origen alienígena con superpoderes, poseedor de una maldad que aterra a sus padres terrícolas y en general representa una amenaza para el mundo.
DIABLILLOS POSEÍDOS
Si el personaje de Rhonda Penmark representa al niño sociópata y los chicos de Midwitch a infantes con origen fuera de este mundo, en la década de 1970 Demian Thorne y Regan McNeil personificaron la maldad infantil sobrenatural. Sus respectivas cintas ("The Omen", 1976, y "The Exorcist", 1973) salieron antes del llamado Satanic Panic, un movimiento moral que durante los años 80 alertaba sobre el peligro que el Satanismo significaba para la juventud estadounidense.
Clip "The Omen"
"Rumbo a la iglesia"
Demian es la maldad escondida entre la inocencia, protegido por enviados infernales, quizá ni siquiera esté consciente de su naturaleza maligna; el hecho es que él es el Anticristo y en las películas subsecuentes su figura se va desenvolviendo. La escena en la que se pone como loco cuando lo llevan a la iglesia asoma esa maldad oculta.
Clip "The Exorcist"
"La advertencia de Regan"
Por su parte Regan es la inocencia corrompida, mancillada por el demonio Pazuzu. Poco a poco su ternura va dando paso a la manifestación de un ser que quiere vengarse del padre Merrin y en el proceso acabar con quien se le ponga en frente.
Clip "The Shining"
"Juega con nosotras"
Con las gemelas Grady de "El resplandor" (Stanley Kubrick, 1980) sucede algo semejante: Son dos almas inocentes que acabaron atrapadas entre las paredes del Hotel Overlook, consumidas por la maldad que habita ahí.
Clip "Night Of The Living Dead"
"Matricidio"
La lista de niños perturbados y que son maldad pura seguirá aumentando, pero si algo tienen en común los personajes de quienes hemos hablado es que carecen de sentimientos, amor y empatía, convirtiéndose en monstruos sin compasión ni moral.
No hay nada más aterrador que ver a un ser en apariencia desprotegido e inocente volverse una máquina de matar, así como Karen, la pequeña del clásico "Night Of The Living Dead" (1968) que convertida en zombie dispone sin compasión de sus padres.
Los niños también son crueles; su lado oscuro está ahí, escondido, esperando una leve oportunidad para salir.
