Abril 2, 2021
Reparto:
James Woods como Jack Crow.
Daniel Baldwin como Julio Montoya.
Sheryl Lee como Katrina.
Thomas Ian Griffith como Jan Valek.
Tim Guinee como el padre Adam Guiteau.
Estreno: 30/10/1998
Director:
John Carpenter
País: EE.UU.
Sinopsis
"Durante el día, el exterminador de vampiros Jack Crow capitanea un grupo de mercenarios cuya misión es eliminar a esos peligrosos seres. Tras la reunión de vampiros en un pueblo de Nuevo México, el grupo de Crow cae en una emboscada que le tiende el terrible Valek."
Netflix de nuevo me trae un filme de un director que admiro montones y que, de alguna manera, no es uno de sus mas reconocidos. Parte del análisis de hoy tiene que ver con el porqué de esto. Sin duda es refrescante cuando la plataforma te presenta películas no tan conocidas por parte de un director reconocido que nos permite ver de manera mas clara la trayectoria de su filmografía. Entremos en materia.
Una de las características que hacen a este filme algo distinto a lo usual de Carpenter es el factor comedia. La manera histriónica en que los personajes se comportan, en especial la del protagonista, son claves evidentes de esto. Otro factor importante es que se encuentra cierta libertad creativa en el guion como para desviarla en cuanto al mito tradicional de los vampiros que todos conocemos. La banda sonora es efectiva y la dirección de Carpenter siempre es efectiva para crear la tensión necesaria cuando se requiere. Los efectos especiales están bien hechos, en especiales los prácticos, en una secuencia en especial, lo cual demuestra el poder de veracidad que los mismos contienen. Las actuaciones cumplen a cabalidad su propósito, pero seria imprudente no mencionar lo bien que esta James Woods en su rol de Jack Crow. Es simplemente fantástico.
Carpenter intenta de alguna manera crear algo similar a lo que es un Western en el cual hay una historia de venganza evidente y una batalla entre dos bandos bien establecidos. Sin embargo, el problema de Carpenter’s Vampire es el elemento de comedia el cual es impulsado en varios momentos en puntos que le quitan mucha seriedad al filme.
Hay que recordar el momento en que James saca este filme, dos años después del desastre que fue Escape from L.A., y entró a dirigir Vampires para tratar de recuperar glorias del pasado. Logró ser la única película de los 90’s de él con ganancia. Sigue siendo un filme entretenido para disfrutar con algo de palomitas de maíz. Tristemente, el factor comedia y estilo Western de esta le quitan seriedad a un filme que quiso ser distinto y lo logró…pero no de la mejor manera.
