28/01/2020
El cine europeo nos sorprende de vez en cuando con joyas que se llevan la admiración del público y la crítica, muy de vez en cuando esas joyas viven dentro del género del terror.
Let the Right On In, o por su título en español “Déjame entrar” del director Tomas Alfredson, es una de esas joyas, que no sólo es aclamada por los expertos, sino que la audiencia en general.
Esta película está basada en la novela del 2004 del mismo nombre escrita por John Ajvide Lindqvist, un famoso escritor de novelas y cuentos cortos de horror. Quien también ayudo a escribir el guión para la película.
El film sigue la historia de Oskar, un tímido niño de doce años, que es acosado en el colegio por sus compañeros, se hace amigo de Eli, una misteriosa vecina de su edad, cuya llegada al barrio coincide con una serie de inexplicables muertes. A pesar de que Oskar sospecha que Eli es un vampiro, intenta que su amistad esté por encima de su miedo.
En esta nota voy a tratar de contarles 10 de las muchas curiosidades sobre esta cinta.
1. Papá sobreprotector
El autor de la novela de la que basa la película no quería que cualquiera adaptara su historia al cine, de hecho, recibió una veintena de solicitudes y todas las rechazó. Incluida la del productor Carl Molinder, no fue sino hasta que éste concretó una reunión en persona con el director Tomas Alfredson el autor que último estuvo dispuesto a prestar los derechos de su novela.
2. Un título con ritmo rockero
"Let the Right One Slip In" es una canción de rock de 1997 del artista inglés Morrisey y fue la que inspiró el título de la novela de la que se basó la película. Además, el título hace referencia a la leyenda de vampiros que dice que éstos no pueden entrar a una casa a menos que sean invitados.
3. ¿Un director cómico?
Inicialmente Alfredson, quien era más conocido por sus películas cómicas y obras teatrales, no estaba interesado en adaptar la historia de una novela dramática y menos de terror. Además, el director, quien es un arduo lector, también es muy quisquilloso con respecto a las novelas y libros que escoge para leer. Sin embargo, le regalaron esta novela, la cual según el mismo cuenta, estuvo en su casa por un largo tiempo hasta que un día decidió echarle una ojeada. Quedando atrapado por la historia y con ganas de adaptarla al cine, aunque según su propia creencia, buenos libros no se pueden convertir en buenas películas. El mismo probó lo contrario.
4. Cero influencias, muchas gracias
Alfredson, sintió que la historia era muy personal y se identificó con sus personajes pues el mismo fue un niño que había sufrido de acoso. Por lo que decidió no educarse con otras películas de horror para evitar influencias negativas o copiar clichés del género. Se enfocó en sus experiencias personales y tomó inspiración en otras fuentes artísticas como pinturas del renacimiento.
5. Ojos del renacimiento
Para darle vida al tono y a la estética de la cinta el director tomó como referencia las pinturas del artista renacentista Hans Holbein. En especial el cuadro de 1538 “Edward VI as a Child.” Alfredson notó que los ojos del pequeño príncipe miraban fuera del cuadro y hacia debajo de una manera muy extraña y tenebrosa. Así que tomó esta referencia e hizo que todos los personajes al comienzo del filme miraran hacia fuera del foco de la cámara y más cerca de este conforme avanzaba la trama.
6. Un casting complejo
Debido a que el director tomó tan personal este proyecto, le tomó casi un año encontrar a los actores que interpretarían a los personajes principales. Según el mismo cuenta, le fue difícil pues el no quería solo encontrarlos por separado sin que fuera un buen complemento para cada uno y además quería que los jóvenes actores procediera de familias buenas y estables que pudieran darle apoyo a sus hijos durante el rodaje.
7. Actuando casi a ciegas
El director no quería que los chicos actores leyeran el guion completo. Ellos no sabían como concluía la historia ni que iba a suceder en la siguiente toma. Su método fue más práctico y personal, pues el les leía las líneas y les explicaba de qué manera quería que las interpretaran. Explicó que, de otra manera, si ellos hubieran leído el guion hubiera sido muy complicado para sus jóvenes mentes y su actuación no hubiera sido tan natural.
8. Cortes importantes
La novela originalmente tocaba muchos otros temas tan profundos como el acoso, pero tanto el director como el escritor querían mantener el enfoque en la relación entre los personajes de Eli y Oskar, por lo que dichos otros temas quedaron fuera de su adaptación para no crear distracciones en la historia.
Uno de esos temas era la pedofilia, un tema muy tabú y crudo para cualquier época y que podría haber traído críticas negativas a la cinta y distraer de su historia principal.
Otro corte, sarcásticamente, que quedó fuera fue la escena en la que se plantea la castración de Eli, quien, según la novela, 200 años atrás era un muchacho al que se le practicó esta sangrienta operación iba a ser mostrada en cámara de manera muy realista y cruda.
El director había pedido a su equipo de maquillaje que fuera lo mas real posible y éstos le consiguieron un cerdo vivo para hacer las tomas de cerca pero cuando Alfredson miró a los tristes ojos del cerdo, dijo que no podía hacerlo y que no hubiera podido dormir si lo hubieran matado, considerando que eso era un mal karma.
9. Un remake bueno, pero no tanto
9. Un remake bueno, pero no tanto
Esta película llegó a gustar tanto que fue nominada para una multitud de premios ganando más de 40 galardones a lo largo de festivales y premiaciones. Cabe destacar que no fue considerada para los Oscar por un tecnicismo debido a las fechas de estreno.
En el 2010, el famoso director Matt Reeves adaptó el guion y dirigió una versión americana de esta historia. Sin embargo, inicialmente la producción le habría ofrecido el puesto al mismísimo Alfredson, quien rechazó la oferta.
Matt Reeves, logró de alguna manera conectarse con el material original y con su producto final materializó una cinta que al igual que la primera gustó mucho pero no tuvo la misma cantidad de premios que la primera.
10. Casi se convierte en una serie para televisión
En el 2015 hubo mucho interés por convertir el material en una serie televisiva. El canal A&E comenzó a desarrollar un proyecto escrito por el creador de Teen Wolf, Jeff Davis luego de ganar la puja para adquirir los derechos contra Showtime. En el 2016 el proyecto se trasladó a TNT, que ordenó la filmación de un piloto aun con Davis como creador y productor ejecutivo, sin embargo, a punto de grabar el episodio el proyecto fue abandonado el siguiente año para desdicha de muchos fans de la obra original.
Para entonces ya se contaba con los actores principales y muchas de las locaciones. Lo último que se supo es que Tomorrow Studios quería comprar los derechos para desarrollar la serie ellos mismo.
