Los personajes clásicos del popular videojuego se congregan en la nueva película de esta saga animada; aunque es buena idea, no quiere decir que se ejecute excelsamente.
FICHA TÉCNICA
Resident Evil: Death Island (Japón, 2023).
- Dirigida por Eiichirō Hasumi.
- Escrita por Makoto Fukami (basada en el videojuego "Resident Evil", creado por Capcom).
- Cinematografía: Yun M. Watanabe.
- Edición: Mitsuo Nishio.
- Música: Rei Kondō.
- Fecha de estreno: 7 de julio de 2023 en cines de Japón; 25 de julio en Blu-ray y formato digital.
- Duración: 91 minutos.
- Voces: Nicole Tompkins, Kevin Dorman, Matthew Mercer, Stephanie Panisello, Erin Cahill, Daman Mills.
Calificación: ★★1/2
SINOPSIS
En la ciudad de San Francisco, en el año 2015, el agente de la DSO, Leon S. Kennedy (voz de Matthew Mercer), tiene la misión de rescatar a un científico que ha sido secuestrado. Mientras, en la BSAA, una división antiterrorista, los agentes Chris Redfield, Rebecca Chambers y Jill Valentine investigan con Claire Redfield un caso que los lleva a la isla - prisión turística de Alcatraz. Ahí enfrentan una nueva variante del Virus T que amenaza con ser liberado por todo el mundo.
Tráiler
Para los aficionados al videojuego Resident Evil, la franquicia cinematográfica podría compararse con el doctor Jeckyll y Mr. Hyde. Tiene un lado "malo", es decir, las películas live action protagonizadas por Milla Jovovich, y otro "bueno", las de animación por computadora. Éstas guardan relación con los videojuegos y en conjunto forman una línea temporal algo rebuscada, pero coherente.
"¿ME PERDÍ DE ALGO?"
Este año llega el cuarto largometraje animado (quinto si se cuenta "Biohazard 4D-Executer" de 2000), "Resident Evil: Dead Island". El espectador casual lo puede ver como otro filme más, derivado de una franquicia que identifica por Milla Jovovich y quizá haya visto alguna de las anteriores producciones animadas. Pero para el acérrimo gamer este el momento que esperaba desde hace mucho tiempo, es su "Avengers... ¡Assemble!" porque reúne por primera vez a los personajes importantes del videojuego. Sin embargo, tanto uno como otro podrían coincidir en que el resultado queda a deber.
"¿ME PERDÍ DE ALGO?"
"Death Island" es secuela de la película animada "Resident Evil: Vendetta" (2017). En su universo se ubica antes del videojuego "Resident Evil 7: Biohazard" y también referencia a otro título, "Resident Evil 5". Si el espectador tiene la suerte de llevar el recuento de la historia podrá llenar los huecos que quedan, como cuando se menciona el estrés postraumático de Jill Valentine. Quien conoce RE por las películas dirigidas por Paul W. S. Anderson, sólo se pregunta qué pudo sucederle a Jill, pero lo mejor es no cuestionar y dejarse llevar por la acción.
Detalles así son los que hacen de "Resident Evil: Death Island" una experiencia poco satisfactoria para quien no esté inmerso en su canon. Hay acción, emoción y la resolución de la historia es entretenida a pesar de ser tan predecible, pero a momentos queda la sensación de haberse perdido algo importante.
CONVENCIÓN DE HÉROES
Todo lo contrario para quienes hayan jugado la mayoría de los títulos. Ver reunidos a Jill Valentine, los hermanos Chris y Claire Redfield, Leon S. Kennedy y Rebecca Chambers es un hito porque es la primera vez que se les ve juntos en una aventura. Después del prólogo, la película abre con una secuencia de acción que tiene tintes de la persecución en la autopista vista en "The Matrix Reloaded" (The Wachowskis, 2003); habría estado mejor si se le hubiese dado un poco de realismo viendo a Leon sufrir mínimo algún rasguño, o usara casco. Pero bueno, es una película animada y de Resident Evil, así que conviene ignorar ese tipo de detalles para disfrutar de la acción, que es entretenida pero sin ser emocionante. La secuencia de Jill y Leon en las cloacas, atacados por los siempre efectivos lickers, es quizá la mejor, y la batalla final, aunque sabemos no implicará riesgo para los héroes, cumple a secas.
BUENOS SIN PROFUNDIDAD
Conforme se desarrolla la trama y los eventos llevan a la reunión de los cinco protagonistas, nos damos cuenta que en realidad todo se centra en tres de ellos. Claire y Rebecca quedan reducidas a meras comparsas que no tienen demasiado peso. Claire parece estar porque sin ella el equipo no estaría completo, y Rebecca cobra importancia rumbo al final, pero ambas parecen quedarse en la banca y entrar al relevo sólo cuando se les requiere. Jill, Chris y Leon cargan con el peso de la historia, mas como personajes son planos, poco interesantes.
Hay química entre ellos, resulta satisfactorio verlos trabajar juntos, pero a nivel individual Leon queda como el alivio cómico gracias a su actitud sarcástica y bromas de una frase; Chris no pasa de ser el líder decidido del grupo, mientras que con Jill, la verdadera alma de la historia, se pudo explorar las consecuencias emocionales de lo que sufrió en RE 5 para darle un enfoque más serio, pero la posibilidad se deshecha a los pocos minutos. De acuerdo, estamos ante una película de acción, zombies y monstruos mutantes, no hay que ser tan exigentes, pero darle a los protagonistas un poquito de interés más allá de ser invencibles es un plus, más si ya llevan tiempo apareciendo en otros formatos.
MALOS DE CARICATURA
El villano central es Dylan Blake, sus ambiciosos planes de venganza representan una amenaza para el mundo, y sería uno de los malos más recordables si no pareciera sacado de las caricaturas sabatinas. El cliché de explicar sus maquinaciones dirigiéndose a cada uno de los héroes resulta largo y cansado; Uno quiere disfrutar de la acción, ver más batallas con monstruos, zombies, y en su lugar pasamos varios minutos escuchando a Blake recriminar a los chicos buenos.
También se desperdicia a María Gómez, aliada de Blake y quien básicamente es la que se encarga de combatir cuerpo a cuerpo con los héroes. Ella fue presentada en "Resident Evil: Vendetta" y pudo ser más que la lugarteniente de Blake al tener una cuenta pendiente con Chris y Leon, sin embargo su rol queda limitado.
Blake y María cumplen para este tipo de película pero quedan mucho a deber, cosa que se intensificaría si pertenecieran a un blockbuster.
EN RESUMEN...
"Resident Evil: Death Island" no es un desastre absoluto, pero resulta muy dispareja. La primera parte de la trama tiene ritmo, es sólida, se encuentran buenas criaturas y zombies (no tantos como pudiera anticiparse), y sus protagonistas tienen la oportunidad de destacar individualmente. Pero toda esa energía se pierde en escenas alargadas, diálogos acartonados, y conforme avanza la historia se va desinflando, quedando sólo en destellos. La animación no es llamativa, y aunque tiene momentos emocionantes no hay uno memorable. En Estados Unidos la película se estrenó en formato casero, pero en Japón salió en salas de cine, por lo que llama más la atención no haya un despliegue de efectos especiales.
A los fans deja situaciones que son relevantes para entender el lore de la saga, pero al parecer sus creadores no pudieron amalgamar algo inolvidable para lo que pudo ser una épica reunión de personajes. La franquicia Resident Evil ha sido castigada por las películas live action y no se diga la desastrosa serie de Netflix sólo esperemos este no sea el inicio del declive de una saga animada que ha sabido mantenerse.