Puede parecer un filme de superhéroes con poderes mentales, pero la pelÃcula de David Cronenberg encierra ideas relacionadas con mutaciones, conspiraciones y el manejo de una fuerza incomprensible para la humanidad.
FICHA TÉCNICA
Scanners (También conocida como "Telépatas mentes destructoras", Canadá, 1981).
- Escrita y dirigida por David Cronenberg.
- Duración: 103 minutos.
- Fecha de estreno: 14 de enero de 1981 en Estados Unidos, 16 de enero del mismo año en Canadá.
- Protagonistas: Jennifer O'Neill, Stephen Lack, Patrick McGoohan, Michael Ironside, Robert A. Silverman.
Tráiler
SINOPSIS
Los scanners son personas con poderosas habilidades telepáticas, resultado de un medicamento aplicado a sus madres durante el perÃodo de gestación. Cameron Vale (Stephen Lack), es un scanner capturado por la empresa ConSec, dedicada al armamento y sistemas de seguridad, para capturar al rebelde scanner Darryl Revok (Michael Ironside).
Quizá inspirada por la popularidad de "Carrie" (1976) y "The Fury" (1978), ambas dirigidas por Brian De Palma y que tratan sobre personas con poderes mentales, "Scanners" es probablemente la pelÃcula más peculiar del cineasta canadiense David Cronenberg, al presentar un body horror que involucra tanto el cuerpo como la mente. Posee un tono de historia de agentes secretos mezclado con ciencia ficción y espionaje industrial, y tiene la peculiaridad de no hacer alusión al sexo, contrario al trabajo del director.
Todo esto integra una historia cautivadora, sugestivamente aterradora y desafiante para el espectador.
En su momento demostró que Cronenberg podÃa hacer una producción más comercial y entretenida, despojada de los complicados temas freudianos abordados en "Shivers" (1975), "Rabid" (1977) y "The Brood" (1979). Esto se reflejó en taquilla al recaudar 14 millones de dólares contra un presupuesto de 3.5 millones.
PODERES Y CONSPIRACIONES
"Scanners" está estructurada como un thriller sacado de una novela de ciencia ficción barata con tonos paranormales. Involucra corporaciones que mueven hilos tras bastidores y realizan reuniones clandestinas en las plataformas del metro; también tiene una bien lograda escena de persecución automovilÃstica (presagio de las que se mostrarÃan años después en "Crash" de 1996), varias balaceras y una fotografÃa potente.
Este acercamiento al cine comercial quedarÃa incompleto si no tuviera el impresionante trabajo de prostéticos y maquillaje de Dick Smith, que involucra venas punzantes, géisers de sangre y por supuesto, la infame cabeza que explota durante los primeros minutos de filme.
VAGABUNDO DE ACCIÓN
La acción y el gore no vuelve superficial a "Scanners". De inicio encierra una noción social presentando a su protagonista, Cameron Vale, interpretado por Stephen Lack, como un indigente. Vale es un paria, un deshecho de la sociedad que no tiene intenciones de mejorar su vida hasta que es rescatado por el doctor Paul Ruth (Patrick McGoohan), su mentor y guÃa en el nuevo mundo y habilidades que está por descubrir.
Fuera de McGoohan quien era famoso por "The Prisioner", una serie británica de culto transmitida a finales de los 60s, y la modelo convertida en actriz Jennifer O'Neill, el resto del reparto no es de renombre. Stephen Slack de hecho se volvió artista plástico (estudió una maestrÃa en la Universidad de Guanajuato, México) y su elección como Vale quizá haya tenido más que ver por su mirada. Dicen que los ojos son el espejo del alma y los de Slack son una ventana a su mente, verdadera artÃfice y motor de la trama. Su voz casi inexpresiva, robótica y con aires de intelectual no es casualidad porque importa más lo que hace con sus poderes que sus acciones. Años después, Slack colaboró en "Dead Ringers" (1988), otro filme de Cronenberg.
SUPERHOMBRE SINIESTRO
Contrario al protagonista poco carismático y demás personajes con los que difÃcilmente se puede hacer conexión, está el memorable villano interpretado por Michael Ironside. Darryl Revok es más interesante que Cameron Vale y de inicio se gana nuestra atención haciendo estallar una cabeza. Ironside se muestra como un actor de carácter intimidante y "Scanners" fue su vitrina para llegar a la miniserie de TV "V: The Final Battle" (1984) y su spin-off "V: The Series" (1984-1985). También es recordado por el slasher "Visiting Hours" (1982) y "Top Gun" (1986), pero su carácter y temple los volvió a demostrar en "Total Recall" (1990) y "Starship Troopers" (1997), ambas bajo la dirección de Paul Verhoeven.
BODY HORROR MENTAL... Y REAL
"Scanners" muestra la telequinesis como una habilidad poderosa; en vez de presentar deformidades fÃsicas (que bien pudo hacerlo), Cronenberg dice que en nuestro cuerpo puede existir una fuerza de la que no estamos conscientes y mucho menos sabemos emplear. ¿Y si tuviéramos una noción sobre su uso? ¿En qué nos volverÃamos, en hombres superdotados o en salvajes con un arma de fuego? Cronenberg da salida a esas cuestiones con un guion complicado que involucra defectos genéticos para crear una forma sutil de horror corporal.
Es inusual ver elementos paranormales en el cine de Cronenberg, pero la concepción de su pelÃcula proviene de una tragedia real. A finales de los años 50s e inicios de los 60s, el uso de Talidomida, un medicamento para aliviar molestias y dolores en mujeres embarazadas, causó a nivel mundial más de 100 mil nacimientos con deformidades y provocó abortos en lo que es considerado el desastre médico más grande de la historia provocado por el hombre. La Talidomida sigue empleándose para tratar ciertos tipos de cáncer y enfermedades de la piel.
Sin necesidad de mostrar aberraciones fÃsicas, Cronenberg plantea que algo semejante puede suceder. El escándalo de la Talidomida ha quedado en el pasado, pero "Scanners" mantiene vigente la paranoica pero escalofriante idea de que los productos de las grandes corporaciones afectan a la ciudadanÃa en general.
REVENTANDO CABEZAS
La producción se vio beneficiada al recibir presupuesto de un fondo gubernamental canadiense, pero debÃa cumplir plazos forzosos que apuraron su realización. Las filmaciones iniciaron sin guion y éste prácticamente fue escrito por Cronenberg sobre la marcha; sin embargo cuenta con grandes aciertos en sus efectos prácticos.
Clip
Cabeza explosiva
Para la famosa escena de la cabeza que el personaje de Darryl Revok hace estallar con el poder de su mente, se realizaron varias pruebas que derivaron en emplear un cráneo de yeso con el exterior hecho de gelatina. El molde fue relleno de vÃsceras, sobras de comida y látex, y al fallar diversos métodos para detonarla, el supervisor de efectos especiales, Gary Zeller, pidió que las cámaras se quedaran rodando y toda la producción se resguardara; Zeller regresó con una escopeta y le disparó, creando asà la impactante toma.
Si bien ese momento es el más emblemático, la parte final muestra la misma calidad de efectos prácticos con el duelo entre Revok y Vale: piel desgarrada, sangre brotando de cabeza y brazos, y un cuerpo calcinado es el resultado. Su poderÃo visual es tal que hasta se ignoran los rostros que llegan a poner los actores, y que en las secuelas se hicieron cada vez más absurdos y graciosos.
Otra escena a destacar, más por su simbolismo que los efectos, es la de Vale interviniendo una computadora. Si bien no es un derroche técnico o involucró tomas complicadas, en ella queda plasmado el poder de la humanidad sobre las máquinas, una idea que viene como anillo al dedo en nuestros dÃas.
MAESTRO DE LA TRANSGRESIÓN
Para algunos "Scanners" representa un retroceso en la carrera de David Cronenberg al carecer del estilo visual y concepto mostrado en sus anteriores filmes, pero su mérito es transgredir y provocar al espectador de una manera más "amable", sin mostrar cuerpos grotescos o deformaciones. Su horror es más digerible que la horrenda revelación de "The Brood" o los parásitos de "Shivers", y el filme puso al director en una vitrina donde ganó exposición.
Después vinieron "Videodrome", "The Fly', "eXistenZ" y otros tÃtulos que terminaron por consolidar a Cronenberg como el maestro del body horror, mas "Scanners" es la producción que estableció al cineasta como una fuerza imparable en su género.