Calificación: ★★½
To Catch a Killer (titulada Misántropo tanto en España como en Hispanoamérica) es una película estadounidense de crimen y drama que se estrenó en cines estadounidenses el 21 de abril de 2023, mientras que estrenó en cines costarricenses el 29 de junio del mismo año. Dirigida por Damián Szifron y protagonizada por Shailene Woodley y Ben Mendelsohn, la película sigue a una joven oficial de policía que es reclutada por el FBI para trabajar en la investigación de un hombre responsable de múltiples asesinatos en la noche de Año Nuevo.
Por el tráiler y la sinopsis uno podría pensar que esta película es un misterio de asesinato como cualquier otro, pero la verdad es que no es así. Una gran parte de la película lo es, pero por alguna razón hay decisiones en el tercer acto que la alejan de lo que pudo haber sido un gran thriller, lamentablemente.
Primero, tenemos que irnos a las bases. ¿Qué es un misántropo? Según la Real Academia Española, una persona misántropa es aquella que tiene una aversión al trato con otras personas. Esto tal vez pueda darles alguna pista de por dónde se orienta la película; sin embargo, me cuestiono mucho la decisión del título porque este reduce las cualidades de los personajes (hay dos que son prácticamente diferentes caras de la misma moneda) a una sola palabra. Es un problema que va mucho más alla de la elección del título: en verdad, tiene que ver con el planteamiento de la constelación de personajes.
El director argentino Damián Szifron nos presenta esta historia con tomas y composiciones muy significativas y llamativas a nivel visual, pero que lamentablemente no llegan a tener un gran impacto en la audiencia. Quiero decir que la construcción de la visión del director está clarísima, solo que me parece que no utilizó los vehículos necesarios para llevar su mensaje. La película está llena de crítica social, especialmente hacia la sociedad estadounidense, pero, excepto por una escena muy específica, lo que pretendía ser crítica acaba pudiendo confundirse con algo mucho más siniestro.
No quiero entrar en lujo de detalles, pero, aunque los criminales siguen siendo seres humanos, ¿dónde se dibuja la línea de la piedad, de las oportunidades y del entendimiento? No es que la película justifique los crímenes del asesino en serie, pero el guion y la visión de Szifron transitan por una línea muy cercana a esto. Una persona que detone terror en las vidas de tantas personas sin arrepentimiento alguno, en mi opinión, no debe verse como alguien con capacidad de cambiar a la ligera.
Cambiando un poco de tema, no todo es tan negativo. Como les decía al principio, sí hay un gran inconveniente entre la relación del personaje principal (interpretado por Shailene Woodley) y el asesino, pero fuera de eso, los personajes están muy bien. Los principales destaques son Ben Mendelsohn y Jovan Adepo. Este último no tiene tantas intervenciones en la pantalla como sus otros dos compañeros de elenco, pero en general logró que sus escenas fuesen memorables y logró balancear el suspenso y el misterio con unos cuantos tintes de comedia. Mendelsohn, en mi opinión, es quien realmente se robó el show. Este actor logró hacer que la audiencia lo odiara y lo amara a la vez. Sus actitudes en el trabajo lo hacen despreciable, pero fuera de ese entorno es muy fácil llegar a quererlo y sentirse identificado con él.
Por su parte, Shailene Woodley está muy bien también, pero no me parece que haya sido fenomenal como otros medios señalan. En realidad, tiene sus momentos altos, pero cuando baja, baja muchísimo. Con esto quiero decir que la actriz hace lo posible por salir a flote, pero es en realidad como está escrito su personaje lo que hace que ella tenga momentos incómodamente bajos.
En general, me parece que To Catch a Killer tiene muy buenas ideas y un excelente recorrido durante sus primeros dos actos, pero una vez que llega al desenlace todo se vuelve más complicado y no en el buen sentido. Una historia que comenzó siendo un juego del gato y el ratón termina siendo una forzada sesión de arrepentimiento y comprensión cuando lo que se necesita es acciones para acabar con la tensión y el misterio. A través de excelentes actuaciones, una buena dirección y un guion bastante cuestionable, To Catch a Killer nos emociona mucho para al final dejarnos un gran sinsabor en el paladar.