La maldición del "horror elevado"

El término se ha empleado en años recientes para identificar cierto tipo de películas con elementos de horror y temas complejos, pero existe en realidad o sólo es una etiqueta?


Desde hace aproximadamente 10 años se ha empleado el término "horror elevado" para referirse a películas que combinan elementos del género con personajes, historias y temas considerados complejos que no tienen cabida en el terror "convencional". Los filmes producidos o distribuidos por el estudio A24 han recibido este calificativo, que los coloca por encima de un slasher, una creature feature o un thriller sobrenatural.

Siete películas del estudio A24

Otras de sus características es que su fecha de producción data de 2010 en adelante, no abusan del jumpscare ni del gore (aunque los emplean), y sus temas habituales abordan problemas sociales como el racismo, condiciones de salud mental y relaciones familiares complicadas.




El término "elevado" indica que la película en cuestión no es violenta ni explotativa, carece de desnudos injustificados, sexualidad gratuita y escenas sangrientas, más bien es seria y tiene cierta vena artística. Como si fuera dirigida a una audiencia que no gusta del horror "convencional" y se le dijera que no debería sentir vergüenza por agradadarle una película que es de terror pero no pertenece a lo común.

Clip
"Silent Night, Deadly Night Part 2" (1987)



JASON CONTRA LOS "PRESUNTUOSOS"
Históricamente el cine de horror no ha tenido una buena reputación en la industria cinematográfica. Con sus excepciones, se le ha tachado de corriente, barato y sin valor artístico. El concepto horror elevado lo "confirma" porque implícitamente asegura que las demás películas del género son basura.


Es cierto que las franquicias del cine de horror "popular" como Friday The 13th, Amityville o A Nightmare on Elm Street usan premisas grotescas, tontas y hasta absurdas, pero muchos consideramos que eso forma parte del encanto del género.

Tráiler
"Arachnophobia" (1990)



La imaginación lleva al ser humano a crear lugares, personajes o situaciones expresadas en historias, relatos y hasta juegos donde proyecta sus miedos. En otras palabras, alguien podría considerar absurda una película como la comedia de horror "Arachnophobia" (Frank Marshall, 1990), pero para quien tenga miedo a las arañas sería la peor experiencia de su vida.



¡ELÉVENSE TODOS!
Ha llegado el momento de cuestionarse si el concepto "horror elevado" tiene alguna validez. Si existe, ¿quiere decir que también hay filmes de "acción elevada"? ¿Que la franquicia John Wick es más refinada que la de Rambo? ¿Hay "comedia elevada"? De ser así, ¿"Airplane!" ("¿Y dónde está el piloto?", David y Jerry Zucker, 1980) es mejor que la irreverente y en ocasiones vulgar "White Chicks" (Keenen Ivory Wayans, 2004)?

"El gabinete del doctor Caligari" (1920)



Pareciera que quienes utilizan el término no recuerdan que esos temas "elevados" se han manifestado desde hace tiempo gracias a títulos como "Night of the Living Death" (George A. Romero, 1968), o hasta "El gabinete del doctor Caligari" (Robert Wiene, 1920), los cuales mezclan ideas alucinantes y aterradoras con sus respectivos comentarios sociales, el racismo y la manipulación del individuo.

"The Shining" (1980)



TRES CLÁSICOS "ELEVADOS"
La efectividad de una película de horror radica en su trama, y al parecer entre las más contundentes en ese sentido están las que conforman la "Sagrada Trinidad" del género: "Rosemary's Baby" (Roman Polanski, 1968), "The Exorcist" (William Friedkin, 1973) y "The Shining" (Stanley Kubrick, 1980).

Rosemary's Baby (1968)

Rosemary (Mia Farrow) es manipulada por su esposo Guy (John Cassavetes) para ser la madre del Anticristo. El filme llega a insinuar que todo podría ser un delirio de ella causado por la presión y angustia de ser madre.

"The Exorcist" es un drama donde una madre busca salvar a su hija poseída por un demonio, pero también incluye a un sacerdote con la fe desmoronada y que se siente culpable por la muerte de su madre.


Por su parte, "The Shining" muestra a Jack Torrance (Jack Nicholson) y su familia aislados de la civilización, mientras él desciende a la locura por los espíritus que habitan el Hotel Overlook.
Un análisis más profundo de estas premisas revela que estos y otros elementos "exclusivos" del horror elevado han estado presentes en el cine de terror mucho tiempo antes de su auge, por lo que viene al caso cuestionar si se trata de una corriente como el Nuevo Extremismo Francés, un subgénero o una moda que en algún momento encontrará su declive.


NO TODO LO QUE ASUSTA ES HORROR
Ver una película bajo el falso espectro del horror elevado conlleva riesgos. Si los temas de "X" (Ti West, 2022), entre ellos la obsesión con la fama, la conexión horror-pornografía y el miedo a envejecer hubieran sido presentados de manera más abstracta sin duda se le habría etiquetado como horror elevado. No es así porque prevalece su estructura de slasher al homenajear a "The Texas Chainsaw Massacre" (Tobe Hooper, 1974), "Eaten Alive" (1976, también dirigida por Hooper) y "Friday The 13th" (Sean S. Cunningham, 1980).

"Barbarian" (2022)



Quererle encontrar lo terrorífico a una película de manera sublime no siempre es una buena idea porque podría caerse en errores. Un caso curioso es el de
"Barbarian" (Zach Cregger, 2022), considerada horror elevado por algunos cuando tiene más jumpscares de lo normal, utiliza efectos CGI, sus actuaciones son exageradas y hasta hubo quienes la calificaron de "perturbadora".

"Lamb" (2021)



Caso contrario el de "Lamb" (Valdimar Johannsson, 2021) también es considerada dentro de la categoría al tratar con la paternidad, la relación humano-animal, y la pérdida de un hijo. Es la historia de una pareja que adopta a una peculiar criatura y posee elementos de terror, pero, ¿por qué es considerada dentro del género? Apesar de ser un drama, "Lamb" incluye elementos de terror (tensión, situaciones perturbadoras) que merecen analizarse por cómo el director los incluye en la historia.


EL ARTE DE HORRORIZAR
El término más apropiado para el considerado horror elevado sería art horror, es decir, horror artístico; incluye todo tipo de obras plásticas, literarias o visuales que provocan incomodidad, miedo e inquietud.
El concepto "horror elevado" implica que el resto del género es basura, cuando quizá todo se reduce a que hay buenas y malas películas de horror.


Asegurar que el cine de terror está en decadencia porque se exagera en el uso de jumpscares o el horror elevado desvirtúa al género resulta exagerado. Ambos recursos fomentarán la creación de nuevos filmes; algunos tendrán una maravillosa ejecución, otros quizá no tanto, pero cual sea su resultado atraerán nuevas audiencias. Buena o mala, elevada o secular, todo lo que buscamos en una película de terror es pasarla bien y llevarnos un buen susto.

JUMPSCARES: UN MAL NECESARIO

Algunas personas prefieren ver en una película de horror un "mal encarnado": criaturas, demonios, extraterrestres, etc., mientras otras prefieren algo más abstracto.


¿Qué hace a una película digna del calificativo "aterradora"? ¿El número de veces que hace saltar al espectador del asiento? El cine contemporáneo de terror está plagado de escenas donde no hay sonido y súbitamente algo, acompañado de su respectivo golpe musical, sorprende al protagonista: un gato en el callejón o la aparición sorpresiva de su mejor amigo, momentos denominados como fake jumpscare o falso susto.

Ejemplo fake jumpscare
Halloween II (1981)




El jumpscare es similar al falso susto, pero se diferencia por ser un cambio abrupto relacionado con un sonido aterrador, un grito o una imagen macabra que aparece repentinamente. Se ha vuelto la táctica más común para asustar a la audiencia, pero al parecer su abuso ha provocado que ésta se olvide de sentir el horror verdadero, ese que se trabaja no sólo viendo monstruos y sonidos, sino con atmósferas provocadoras, movimientos de cámara, efectos especiales, actores, montaje... es decir, todos los recursos con los que dispone el director.

Ejemplo de jumpscare
Friday The 13th (2009)




Un espectador no debería llegar al clímax luego de sobrexponerse a un desfile de ruidos y sustos, porque llegará al momento cumbre de la historia liberado de toda tensión, relajado por haberla soltado entre jumpscares y falsos sustos. Perdonando la analogía, el cine de horror debería ser como el sexo, ustedes entienden.

Tráiler
The Village (2004)



MERCADOTECNIA ENGAÑOSA
Los tráilers juegan un papel importante en las expectativas del público. En su momento el avance de "The Village" (M. Night Shyamalan, 2004) la vendió como una película de monstruos cuando en verdad se trata de un romance de época, ¿cuántos se decepcionaron porque no vieron una criatura? También vale la pena cuestionar qué tanta ingerencia tiene el director cuando se promociona su película.

Los jumpscares efectivos de "Insidious"


Hay filmes exitosos y bien recibidos como "Insidious" y "The Conjuring" que tienen jumpscares, pero se diferencian por ejemplo de "The Curse of La Llorona" que su terror es generado por elementos hechos para dar miedo y no del vecino que saluda repentinamente.

Pareciera que el exceso de jumpscares, falsos sustos y tráilers que "mienten" sobre lo que trata una película han contribuido a que el término "horror elevado" cobre fuerza al buscar nuevas formas de provocar miedo en la audiencia, con imágenes más abstractas, violencia menos gráfica y usando personajes más complejos.




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