Reseña - "Skinamarink": Pesadilla surrealista


Sin nada de sangre, nula violencia pero con una atmósfera tensa y que genera incomodidad, esta película de horror experimental debe vivirse con los sentidos.


FICHA TÉCNICA
"Skinamarink" (Canadá, 2022).
- Escrita, dirigida y editada por Kyle Edward Ball.
- Cinematografía: Jamie McRae.
- Fecha de estreno: 25 de julio de 2022 en el Fantasia International Film Festival de Montreal, Canadá; 13 de enero de 2023 en Norteamérica.
- Protagonistas: Lucas Paul, Dali Rose Tetreault, Ross Paul, Jaime Hill.

Calificación ★★★★

Tráiler

SINOPSIS
En una noche de 1995, los pequeños hermanos Kevin (Lucas Paul) y Kylee (Dali Rose Tetreault) se dan cuenta que sus padres (Ross Paul y Jaime Hill) no están en casa, y las puertas, ventanas y otros objetos están desapareciendo.

"Skinamarink" fue filmada con un presupuesto de 15 mil dólares y luego de ser exhibida en el Festival Fantasía de Montreal, por error una copia se filtró a Internet, causando sensación en Twitter, TikTok, Reddit y otras redes sociales. Fue bien recibida por la crítica, pero ha dividido al público.

Clip
The Simpsons
"Make Room for Lisa" (S10 Ep. 16)



Probablemente hayan visto ese capítulo de "The Simpsons" (cuando todavía eran buenos) donde Lisa y Homero se meten en tanques de aislamiento; mientras ella empieza a experimentar visiones que le causan asombro e incomodidad, Homero pasa por momentos que solo a él pueden ocurrirle. Quizá esta es la mejor manera de ejemplificar "Skinamarink", una película de horror experimental que puede disfrutarse, odiarse o quizá hasta algunos no conecten con ella, pero definitivamente es inolvidable.




La sinopsis descrita aquí y en otros lugares es lo más cercano a una trama para esta película, que desde ahora hay que aclarar no es pietaje encontrado ni falso documental. Es un filme contado desde la perspectiva de dos niños de entre cinco y seis años, aproximadamente. Mientras menos detalles se sepan del filme, mejor, pero tal vez sea necesario comentar algunas cosas para comprender esta producción canadiense que para algunos puede ser una experiencia aterradora.

Clip
"La casa"



IMÁGENES TENEBROSAS
El tráiler impone, es tenebroso y da una idea de lo que puede ser esta experiencia. Hablando del filme, de inmediato destaca la fotografía granulada y ese sonido molesto conocido como hiss, ambos se percibían en las viejas salas de cine, cuando no existía el 4K ni el Dolby Stereo. Las tomas al interior de la casa, que parecen sin sentido y al azar, otorgan una apariencia surrealista al grado de dar la impresión de estar presenciando un sueño, que entre la oscuridad, visiones espeluznantes y voces cavernosas se vuelve una pesadilla para sus pequeños protagonistas así como para el espectador, si está dispuesto a dejarse llevar por lo que ve y escucha.


Sin ser un ataque a los sentidos, las imágenes se conjugan con un diseño de sonido nada espectacular pero sí muy efectivo, formidable. Movimientos lentos de cámara y tomas fijas completan el trabajo de adentrarnos en una casa donde algo sucede, ¿pero qué?, esa respuesta queda a interpretación del espectador. No es una situación común: es mitad de la noche, en una casa donde dos niños deambulan y se enfrentan con algo, mientras en la TV pasan caricaturas viejas que en ese contexto se vuelven espeluznantes.




MIEDOS INFANTILES
Uno de los factores a considerar para hacer de "Skinamarink" una experiencia entretenida es ponerse en el lugar de sus protagonistas. Obviamente por su edad, Kevin y Kylee no son personajes con los que el espectador tenga intereses en común, pero sí puede identificarse con el miedo que todos experimentamos en mayor o menor grado cuando fuimos niños. ¿Cuántos no corrimos de la cama al baño, o del switch de la luz hacia las sábanas porque la oscuridad nos daba miedo? Ese temor básico y primitivo está presente en cada toma, existe esa sensación de que algo va a suceder y créanme, sucede.



Otra forma de ponerse en los zapatos de los niños son las tomas ejecutadas a un nivel que semeja su estatura. El recurso nos ubica en su perspectiva y compensa la necesidad de ver sus reacciones como ocurriría en una película convencional, pero también sumerge al espectador en un microcosmos siniestro, donde no hay adultos, solo un par de chiquillos indefensos.
No hay jumpscares ni falsos sustos, y los espantos que hay no están trabajados como los de una franquicia hollywoodense; tal vez no hagan brincar, pero sí asombran por su súbita aparición.




LA CONEXIÓN "BLAIR WITCH"
Como todo arte, el cine es subjetivo y en el género de horror esto es muy marcado: Lo que asusta a algunos no inquieta a otros, y claro que esta película tendrá sus detractores. Eso sucedió en su momento con "The Blair Witch Project" (Daniel Myrick y Eduardo Sánchez, 1999), que a muchos nos costó días de no conciliar el sueño mientras que otros se sintieron timados.
"Skinamarink" es la Blair Witch del Siglo XXI precisamente porque no todos conectarán con ella, pero quienes lo hagan siempre la recordarán como un filme aterrador.




En cuanto a su difusión, cada una empleó el modo más representativo de su era: "Blair Witch" usó la Internet para difundir su campaña viral; "Skinamarink" aprovechó que por un error se descargó una copia del filme que llegó a Internet, por lo que varios fragmentos se esparcieron por redes sociales. Ambas comparten la forma de recomendación más eficiente en la historia, la de boca en boca, que en estos tiempos ahora se llama like, share o retweet.




También portan el espíritu del cine independiente de horror, ese que se olvida de grandes presupuestos e ideas convencionales para sorprender con un terror puro, efectivo, al cual hay que apoyar no solo recomendando la película, sino viéndola en el cine. Hoy encontramos todo haciendo una buena búsqueda en Internet, pero se debe apoyar al cineasta independiente y talentoso; si "Skinamarink" encuentra distribuidora, verla en pantalla grande sería una forma de agradecer a sus creadores y decirles "¡hey, disfruté tu filme!".

Clip
Presentación de "Skinamarink" por su director, Kyle Edward Ball



VEREDICTO
La sensación que deja "Skinamarink" es como responder una pregunta abierta: no hay respuestas correctas o equivocadas, todo se reduce a una experiencia. La frase popular mexicana "Hablas de la feria como te fue en ella" queda como anillo al dedo para esta película, que juega con nuestros miedos y los saca a flote para sumergirnos en un experimento de terror. Cuando su director y escritor, Kyle Edward Ball, dice que les puede provocar pesadillas y quitarles el sueño, créanle, porque me atrevo a asegurar que estamos ante un nuevo fenómeno en el cine de horror.

 

Publicar un comentario

¿Deseas compartirnos algún comentario?

Artículo Anterior Artículo Siguiente