¡Bienvenidos, amantes del terror!
El día de hoy visitaremos el Queen Mary. Este transatlántico británico retirado se encuentra anclado en Long Beach, California, Estados Unidos. Se construyó entre 1930 y 1934 y funcionó entre 1936 y 1967, treinta y un años durante los que cumplió varias funciones, transportó a muchas personas y vivió varios momentos históricos.
Desde el momento de su construcción algo no andaba bien. Durante su construcción, de hecho, ocurrió la Gran Depresión y esto llevó a la empresa a unirse con otra entidad británica para poder concluir esta embarcación. Como mencioné anteriormente, comenzó sus operaciones en 1936 y, no mucho tiempo después, debido al inicio de la Segunda Guerra Mundial, su función principal cambió a la de transportar a tropas de guerra.
El Queen Mary alcanzaba velocidades tan altas que los alemanes y sus submarinos nunca pudieron alcanzarlo. Después de la guerra y debido al incremento de los viajes aéreos de los civiles, las operaciones del Queen Mary fueron disminuyendo paulatinamente hasta acabar anclado permanentemente en Long Beach.
Fue la naturaleza abandonada de la embarcación y su pasado histórico lo que la convirtió en un eje central de historias paranormales. Se dice que hubo un pasajero de tercera clase llamado William Addamson, quien falleció en la habitación B-340 del Queen Mary por razones desconocidas. Desde este evento, se dice que quien duerma en esta habitación experimenta sombras extrañas que los observan toda la noche, que les quitan las cobijas mientras duermen y que el lavabo se abre aun cuando no hay nadie en la habitación.
En una sala de eventos del Queen Mary llamada “The Mauretania Room”, en 1989, tres empleadas de la embarcación entraron para limpiar. Para su sorpresa, cuando entraron, vieron a un hombre sentado en la pista de baile. Este inmediatamente se levantó, las volvió a ver y les dijo que se fueran de allí. Las mujeres, muy confundidas y asustadas, llamaron a seguridad e, inmediatamente después de haberlo hecho, el hombre desapareció frente a sus propios ojos.
En el cuarto de calderas #4, varios trabajadores han reportado el avistamiento de una niña muy pequeña chupándose el dedo y con un oso de peluche en mano. En la compuerta #13 falleció un trabajador en 1966, cuando quedó atascado después de que se diera la orden de cerrar las puertas. Después de este incidente, cada vez que alguien pasa por esta zona, asegura que siente a alguien detrás suyo corriendo.
Así como estas historias, hay muchas de índole paranormal más alrededor del Queen Mary y, aunque varias personas parece que sí fallecieron dentro de esta embarcación, queda a discreción de cada quien creer si estas presencias del más allá de verdad están allí dentro o no.
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