"Nosferatu" cumple 100 años de ser, además de un referente en el expresionismo alemán, una de las películas que revolucionó el horror y el subgénero de vampiros.
FICHA TÉCNICA
- Nosferatu: A Symphony Of Horror (Nosferatu: una sinfonía de horror).
- Dirigida por Friedrich Wilhelm Murnau.
- Guión de Henrik Galeen.
- Basada en "Drácula" de Bram Stocker (sin acreditar al momento de estrenarse).
- Directores de fotografía: Fritz Arno Wagner y Günther Krampf (este sin acreditar).
- Protagonistas: Max Schreck, Gustav von Wangenheim, Greta Shröder, Alexander Granach.
- Fecha de estreno: 4 de marzo de 1922.
Clip "Orlok, el vampiro"
Cuando se piensa en la posibilidad de que todas las copias de la película "Nosferatu" hubieran sido destruidas, no se puede evitar sentir un escalofrío en la espalda.
Pensémoslo: Tarde o temprano se hubiera hecho una cinta basada en "Drácula" de Bram Stocker, pero tendría elementos que hubieran hecho muy diferentes al cine de horror y vampiros como los conocemos... O probablemente lo hubieran mejorado, nunca lo sabremos. Como fuera el caso nos hubiéramos perdido del filme que sirvió como modelo para los que le siguieron en el género y además marcó el nacimiento de una de sus criaturas más representativas.
"Nosferatu" vio su estreno el 4 de marzo de 1922 en Alemania y, como sucede en las historias de vampiros, fue perseguida por una enfurecida turba linchadora encarnada en la persona de Florence Balcombe, la viuda de Bram Stocker y dueña de los derechos de "Drácula", quien alertada que la obra de su esposo había sido adaptada a la pantalla grande sin su permiso demandó a los productores de la película; al ganar el litigio, la corte determinó que todas las copias fueran destruidas. Y es que a pesar de cambiar algunos detalles a la trama como nombres de lugares y personajes, las semejanzas con el trabajo de Stocker resultaron obvias.
NACIDO ENTRE LAS SOMBRAS
La película fue producida por Prana Films, un pequeño estudio creado por Enrico Dieckmann y Albin Grau, quien tuvo la idea de hacer un filme de vampiros retomando un recuento apócrifo de sus días como soldado durante la Primera Guerra Mundial. Prana Films buscaba hacer cintas basadas en lo oculto y eso se aprecia en la escena donde hay una página con símbolos extraños en la que se cuenta el origen de Nosferatu; el misticismo y aura misteriosa de la cinta dejaba verse desde su concepción.
Clip " El barco de la muerte"
El guión fue escrito por Henrick Galeen, codirector de "The Golem" (1915), otro clásico de horror del cine mudo. Galeen se basó en "Drácula" para contar la historia del Conde Orlok (interpretado por un siniestro y magistral Max Schreck), quien siembra el terror durante su travesía náutica hacia su nuevo hogar y en el pueblo donde este se encuentra. Mas no todo es aterrador: resulta imposible no sonreír durante esos momentos de humor involuntario, como cuando el Conde camina cargando su propio ataúd o cuando le dice a Thomas Hutter (Gustav von Wangenheim) que su esposa "tiene un bonito cuello", aunque detalles como esos le dan un toque delirante, surrealista.
Clip "El sacrificio de Ellen"
ELLEN, LA MATAVAMPIROS
Max Schreck, a quien también le rodea el misterio porque se decía que era un vampiro real, hizo inmortal el aspecto de roedor de Orlok y le dotó un aura que para las audiencias modernas puede ser gótica, cool, pero para el público de 1922 resultó estremecedora. El Conde es la maldad encarnada, solo piensa en matar para alimentarse y está alejado de la figura romántica que 70 años después mostró Francis Ford Coppola en "Bram Stocker's Dracula" (1992) o de los chupasangre con tintes eróticos en las producciones británicas de los Estudios Hammer entre los años 1950 y 1970.
Pero en medio del horror que provoca Orlok y el terror de Thomas Hutter al enterarse de la naturaleza de este, se encuentra Ellen (Greta Shröder), la esposa de Thomas.
Desde luego tenía que haber un personaje que sufriera el asedio directo del vampiro, pero Ellen es más que eso porque termina siendo el instrumento de la victoria sobre el mal, al sacrificarse para provocar que la tenebrosa criatura de la noche muera al ser tocada por los rayos del sol. Ellen Hutter no encaja en el término contemporáneo de la Final Girl (la última sobreviviente en una cinta de horror), pero bajo un punto de vista moderno es la verdadera heroína. No confundir esto con un intento de colgar su desempeño en la era moderna del woke o de la mujer que todo lo puede, esta observación es simplemente eso: un detalle circunstancial que se resalta porque sin Ellen no habría resolución.
Tráiler Shadow Of The Vampire (2000)
EL LEGADO
"Nosferatu" cambió al cine de horror y dio a los vampiros el concepto (que se convirtió en un tropo del subgénero) de que la luz solar es mortal para ellos cuando en el relato de Bram Stocker solo los debilitaba. Sin el Conde Orlok no existiría el Drácula de Bela Lugosi, ni el pesadillesco Kurt Barlow que el director Tobe Hooper mostró en la miniserie "Salem's Lot" de 1979, donde su aspecto fue inspirado en el de Max Schreck. Ese mismo año, el director Werner Herzog estrenó "Nosferatu The Vampire" con Klaus Kinski, pero nombrando Drácula al personaje.
En el 2000, Willem Dafoe dio una formidable interpretación como Schreck en "Shadow Of The Vampire" de E. Elias Merhige, cinta donde se retoma la idea que el actor era un vampiro. Doce años después, Joe Hill escribió la novela "NOS4A2", donde una joven con habilidades sobrenaturales persigue a un ser inmortal que secuestra niños; la historia fue adaptada en una serie de televisión que hasta el momento lleva dos temporadas. En un futuro cercano tendremos una nueva versión de Nosferatu protagonizada por Anya Taylor-Joy y dirigida por Robert Eggers, creador de las aclamadas "The VVitch" (2015) y "The Lighthouse" (2019), por lo que se espera con altas expectativas.
Así, la influencia y la presencia de Nosferatu siguen presentes. Son ya 100 años en los que la sombra de esa figura cadavérica de ojos desorbitados, dientes de roedor, con calva y manos como tenazas se alarga sobre la pared para darnos una película que no solo es uno de los emblemas del expresionismo alemán, sino el legado a todo un género y al arte cinematográfico. Muchas teorías la rodean sobre si encierra un discurso antisemita o advirtió los horrores de la Segunda Guerra Mundial, al tiempo que arrastraba los vividos durante la Primera, pero independientemente de ello la obra de F. W. Murnau es indispensable para todo aficionado al cine, es una muestra de cómo una película puede ser macabra sin tanto artilugio o pretensión.
Entre las sombras del cine de horror se esconde la inmortal silueta de Nosferatu, quien está dispuesto a acechar nuestros miedos durante los siguientes 100 años y hasta el fin de la eternidad, porque después de todo ¿Qué es el tiempo para un vampiro?
