Conocer nuevas costumbres puede ser fascinante, pero en este género el terror surge cuando se exige un ritual para satisfacer a una deidad pagana.
Una voz cavernosa, alguien escondido entre las sombras; una tormenta, el brillo de un cuchillo que rompe la oscuridad de la noche... ¡Claro que todo eso nos pone en un tono misterioso y de terror! Pero no todo tiene que ser con un ambiente oscuro, a la luz del día también ocurren cosas inquietantes, sobre todo si nos encontramos fuera de nuestro ambiente habitual, como sucede en las películas de horror folclórico.
Desde tiempos inmemoriales las leyendas y mitos forman parte de nuestra cultura, pero si hay algo que se encuentre más arraigado en un pueblo es un sistema de creencias, llámese religión, tradiciones o costumbres. El folk horror es un género complicado en ese sentido porque no solo habla de cómo un grupo de individuos se rige por ideologías religiosas, también muestra cómo reaccionamos al estar fuera de nuestro ambiente cultural cotidiano.
Tráiler "Onibaba" (Japón, 1964)
DOS TRÍADAS IMPURAS
Cintas como "El Golem, "Viy" u "Onibaba" cuentan historias donde sus personajes están a merced de la tradición, la superstición y seres sobrenaturales que los asedian, pero el horror folclórico como se le conoce surgió en la década de los 70 durante el siglo pasado. Su precursora inmediata es "Witchfinder General" (llamada "The Conqueror Worm" en Estados Unidos para conectarla con otras películas de Edgar Allan Poe), dirigida por Michael Reeves y estrenada en 1968 con Vincent Price como un autoproclamado cazador de brujas durante la Guerra Civil Inglesa. Es un recuento ficticio de sucesos ocurridos en 1645, pero entredeja ver tres elementos básicos en el género de horror folclórico: locaciones rurales, un enfermizo fanatismo religioso y ejecuciones, estos dos últimos manifestados más adelante en forma de cultos y sacrificios.
Tráiler "Witchfinder General" (1968)
Le siguió "The Blood On Satan's Claw" (Piers Haggard, 1971), que trata de cómo los jóvenes de una comunidad inglesa en el Siglo XVIII caen bajo la influencia de un ser demoníaco.
Tráiler "The Blood On Satan's Claw" (1971)
Dos años después llegó la que es considerada la película más importante del género: "The Wicker Man" de Robin Hardy, con Edward Woodward como un devoto policía que al investigar la desaparición de una niña se encuentra con un culto pagano liderado por Christopher Lee, quien a pesar de no aparecer todo el tiempo en pantalla se las arregla para dar una de sus mejores actuaciones.
Tráiler "The Wicker Man" (1973)
CUANDO LA FE DA PÁNICO
¿Qué tienen en común estas tres películas, además de ser producciones británicas? Que fueron filmadas en la campiña inglesa, no en estudios, y suceden a la luz del día, no en la oscuridad; transmiten una sensación de incómodo realismo porque la audiencia no lidia con un antagonista personificado en un asesino en serie, un científico malévolo o un monstruo/criatura sobrenatural o extraterrestre, sino ante una creencia arraigada en un grupo de personas, lo que les convierte en un enemigo omnipresente.
En corto: el horror folclórico se basa en la estética y tono de la película, no tanto en su historia porque lo importante es la ATMÓSFERA de aislamiento y estar a merced de un fanatismo que generalmente es mortal, o en el mejor de los casos el protagonista termina siendo un fiel creyente de aquella ideología que lo aterraba.
Tráiler "The Kill List" (2012)
CUATRO ELEMENTOS INCÓMODOS
Adam Scoville, un estudioso del horror folclórico, establece en su libro "Folk Horror: Hours Dreadful and Things Strange" publicado en 2017 cuatro elementos para entender este género:
Tráiler "Apostle" (2018)
1) Trata sobre grupos aislados que se sitúan en locaciones rurales; son costumbristas y están alejados del mundo moderno.
2) La sensación de incomunicación se presenta en toda la trama. Sus protagonistas son individuos que se alejan de su estilo de vida y llegan a una sociedad con costumbres diferentes, pero son incapaces de irse.
3) Se mencionan elementos de paganismo, lo oculto o sobrenatural (Rituales, magia negra, satanismo, brujería, etc); son creencias distorsionadas ante ojos ajenos y manifestadas en forma de fervor religioso que llevan a un clímax oscuro.
4) Es necesario cometer un sacrificio, ya sea con acciones violentas o sobrenaturales. No hay "agresiones modernas" con pistolas o tecnología, sino con armas rituales como cuchillos, dagas o espadas.
Tráiler "The Medium" (2021)
RESURGIMIENTO
Filmes como "Hereditary", "Midsommar", "The Ritual", "Apostle" o "The VVitch" han revigorizado el género y lo han vuelto popular en los últimos años. Agreguemos cintas asiáticas como "The Medium" o "Impetigore" que tuvieron su precedente en "Ju-on" (2000) o "Shutter" (2004) y tenemos un auge de películas donde, como pasó con el pietaje encontrado, empiezan a salir hasta por debajo de las piedras. Por cada "Hereditary" hay cinco que quieren ser su sucesora, sin embargo parece que el género pertenece a cineastas como Ari Aster o Robert Eggers (¿Quién más espera "The Northman" con ansias?) que ya lo tienen medido y saben exactamente lo que quieren, encontrando nuevas formas de infundir miedo a la audiencia.
El horror folclórico es una especie de brecha generacional donde el pasado y lo espiritual chocan contra el presente y el razonamiento. Como sucede en las historias donde los animales atacan, los personajes salen de su comodidad y lujos de la vida diaria para enfrentarse en este caso a fuerzas sobrenaturales que representan la ansiedad de no poder dominar lo que no se puede ver ni combatir, porque como dicen "La fe mueve montañas" y cuando esta es ciega y llega al fanatismo se convierte en el más aterrador de los miedos.
