La motosierra ruge por justicia - Horror Hazard

 Febrero 16, 2022


"La Masacre de Texas" original sigue provocando miedo e incomodidad entre los espectadores, pero detrás de ella se esconde una película de denuncia y crítica social hacia la situación que Estados Unidos vivía durante la década de 1970.



Leatherface aportó al cine slasher la figura del inmenso asesino sin rostro, así como el uso de herramientas para acabar con sus víctimas.


A casi 48 años de haberse estrenado, "The Texas Chain Saw Massacre" sigue siendo una cinta emblemática del cine de horror. Pero detrás de su claustrofóbico ambiente e imágenes delirantes hay un subtexto que contar: el relato de dos hermanos que se encontraron con Leatherface encierra un discurso social donde su director, Tobe Hooper, expone la decadencia por la que pasaban los Estados Unidos.


Tobe Hooper incluyó sutilmente en su película la idea que el gobierno mentía al público, mientras que la difusión de imágenes violentas en los medios de comunicación también fue inspiración para la cinta.

Clip Títulos iniciales


GÉNESIS

El cine de terror no solo es jumpscares, monstruos de pesadilla o asesinos sedientos de sangre, también sirve para denunciar lo retorcido del mundo y de la sociedad.

Dirigida por Tobe Hooper, "The Texas Chain Saw Massacre" (La masacre de Texas) llegó a las salas de cine en 1974 para contarnos una historia de horror perturbadora, pero que al mismo tiempo es una metáfora sobre el momento social que vivía Estados Unidos a mediados de la década de los años 70 del siglo pasado.

La distintiva narración del actor John Larroquette con la que inicia la película nos advierte que lo que estamos a punto de ver es un "recuento" de lo sucedido el 18 de agosto de 1973 a los hermanos Sally y Franklin Hardesty, pero esta historia es cien por ciento ficticia.

Desde luego y como muchos saben, la trama de 'La masacre de Texas" está basada libremente en los crímenes cometidos entre 1947 y 1952 por el infame asesino serial Ed Gein, pero su inspiración también podría remontarnos a las barbaridades cometidas por el clan de Sawney Bean, que durante el Siglo XVI y por 25 años aterrorizó las Tierras Altas de Escocia asaltando, matando y devorando a sus víctimas, un mito que también queda más en la ficción que en la realidad. Pero los actos de Gein y Bean sirven para exponer el contexto de un escenario desolador, sucio y cruel, que al parecer era la percepción que Tobe Hooper tenía de Estados Unidos.

Texas...Qué mejor estado para representar al indomable espíritu del vaquero estadounidense, siempre gallardo, aventurero y que busca una vida mejor en el Oeste. Pero el vaquero de los años 70, es decir el ciudadano promedio, estaba desilusionado con una guerra perdida en Vietnam, una economía desgastada y sin credibilidad hacia sus autoridades, ya que su presidente, Richard Nixon, le mintió en la cara al decirle "no soy un ladrón" y resultó ser el orquestador del Escándalo Watergate.


La escena de la cena familiar incluye tonos de horror y humor que ayudan a establecer ese tono delirante y a la vez pesadillesco que tiene la escena.

Clip Cena en familia


LA MASACRE

Los hermanos Hardesty viajan acompañados de otros tres amigos y tienen la mala suerte de toparse con el llamado Autostopista, que los llevará a conocer lo que podríamos denominar “el lado oscuro de América" cuando se topan con el impecable Leatherface, quien con su motosierra, ropa de carnicero y máscaras hechas de piel humana, es una mole furiosa que sirve para representar la pesadilla en la que se puede transformar el Sueño Americano en un segundo. Para cuando Sally conoce a los Sawyer, la "adorable" familia caníbal de Leatherface, Tobe Hooper ya nos había hecho sentir horror e incomodidad al mostrarnos objetos hechos con huesos y piel humana; ahora nos muestra terror, locura y claustrofobia gracias a sus tomas con ángulos cerrados, pero sobre todo con el desquiciante desempeño de Marilyn Burns (RIP) como Sally, convirtiéndose en precursora de las Final Girls en el cine moderno de terror.

Dentro de ese desfile de horrores hay una toma donde los Sawyer son una versión deformada de la familia feliz estadounidense, incluso Leatherface hace el papel de madre con su máscara maquillada, de aspecto femenino; junto con el Autostopista y en compañía de El Cocinero y el abuelo Sawyer, se convierten en una retorcida parodia de las familias felices que se presentaban en las sitcoms (comedias de situación); el Sueño Americano convertido en una aberración que, al contrario de lo visto en series como "Hechizada" o "La Familia Brady, vive en una casa mugrienta y en ruinas. Esa era la visión que tenía Tobe Hooper de un país que empezaba a padecer una crisis energética, pero que vivía y hasta se regodeaba en los excesos de la música disco y las drogas mientras que el movimiento contracultural ya estaba desgastado.

Impulsada sólo por su instinto, Sally escapa de manera milagrosa para darnos un final que raya en la histeria, el éxtasis y la locura; después vemos a Leatherface danzando macabramente con su motosierra para dejarnos una sensación incómoda y perturbadora, como si de verdad hubiéramos estado en esa casucha decrépita, entre el asfixiante calor y la demencia.


"La masacre de Texas" se ha convertido en una franquicia que, no obstante de ofrecer secuelas disparejas en tono y calidad, tiene sus seguidores. 

Tráiler "Texas Chain Saw Massacre: The Next Generation"


EL LEGADO 

La cinta fue todo un hito para su época, más por la temática por el horror que despertó en los espectadores; no recaudó millones debido a la censura que le impusieron, y eso que Hooper se encargó de mostrar poca sangre, aunque la palabra "Masacre" del título nos dé la idea que la veremos por litros. 

Como sucedió con muchas otras películas, "The Texas Chainsaw Massacre" encontró una recepción más amplia en formato casero. La segunda parte llegó un poco tarde, 10 años después, pero se enfocó en el humor negro para dejar a un lado el tono crítico de la primera parte. Su tercera entrega retomó el horror y en ella puede verse a Viggo Mortensen, conocido por ser Aragorn en la trilogía "El Señor de los Anillos",mientras que en la cuarta, los ganadores del Oscar, Renée Zellwegger y Matthew McConaughey, iniciaron sus carreras en una cinta delirante con tintes de autoparodia y un argumento estrambótico, que sin embargo es una vil copia de la película original.

Le siguieron remakes, precuelas y secuelas, todas recibidas duramente por la crítica, pero eso no evitó 

que hasta el momento se hayan filmado 8 entregas en total, además de cómics y videojuegos, y con una nueva película próxima a estrenarse en Netflix, que al estilo de la franquicia "Halloween" nos pide olvidemos todas las continuaciones que surgieron porque es secuela directa de la película de 1974. Habrá que verla.

Cuarenta y ocho años después de estrenarse, "The Texas Chain Saw Massacre" no pierde su impacto emocional y cultural. Esa visión ofrecida por Tobe Hooper del microcosmos que es la sociedad estadounidense puede tornarse en una metáfora sobre los horrores del mundo y la pérdida de la inocencia de manera cruel y despiadada, porque la vida no es más que un caníbal que quiere comernos vivos y acabar con nuestra poca cordura.

Verla por primera vez es comparable a subirse a una montaña rusa y para quienes no la han experimentado se convierte en una prueba de qué tanto horror se puede soportar. Cuarenta y ocho años después el ruido de la motosierra no ha cesado, pide justicia para una sociedad segregada que no se ha ido y se oculta a plena vista.

Está ahí, esperándonos.

Clip La danza de la motosierra


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