Octubre 10, 2021
"ร่างทรง" (Rang Song, The Medium; Tailandia-Corea del Sur, 2021), dirigida por Banjong Pisanthanakun.
QUISIERON PONERLE: "La película más aterradora del año".
PERO ACABARON PONIÉNDOLE: "La médium".
PROTAGONISTAS: Narilya Gulmongkolpech, Sawanee Utoomma, Sirani Yankittikan, Yasaka Chaisorn.
CALIFICACIÓN: 8.5 (⭐⭐⭐ 1/2)
De vez en cuando se estrena una película a la cual etiquetan como "La más aterradora del año". Semejante título debe ser visto con suspicacia porque genera expectativas elevadas que si no se cumplen, se dice que es "mala", que "no da miedo", que "está bien chafa porque no asusta", etc., todo porque el espectador no salió traumado del cine ni se hizo pipí del susto en su asiento. Si una película no asusta a todos no necesariamente quiere decir que es mala, quizá por eso el terror es un género tan duramente incomprendido y castigado, porque se convierte en su propio enemigo.
Pero el miedo puede resultar una experiencia agradable y por eso se busca revivir la adrenalina sentida en algún momento; cuando eso sucede es una bendición para nosotros, los fans del género. Así, "The Medium" quizá se queda corta en merecer ese título de "la más aterradora", pero cumple bien con dejar satisfecho al espectador.
Se estrenó en julio pasado durante el Festival Internacional de Cine de Bucheon, Corea del Sur, ganando el premio a Mejor Película, nada malo para iniciar su palmarés. Pero más allá de la reputación que le precede (eso de que la gente lloraba de miedo, sufría pesadillas y tenían que verla en el cine con las luces encendidas, algo aberrante y sin chiste si me preguntan), primero hay que hacer énfasis en que "The Medium" fue producida y coescrita por el coreano Na Hong-jin, el visionario director de "The Wailing" (2016) y dirigida por Banjong Pisanthanakun, quien en 2004 nos dio la magnífica "Shutter" y que en sus últimos dos trabajos se decantó por la comedia romántica. Ahora retoma el género con una película donde la atmósfera es clave para transmitir esa sensación de terror y romper la barrera cultural, ya que se apoya en las costumbres y tradiciones de Tailandia para crear una tensión que se desata durante la última hora de película, cuya duración es de 2 horas con 10 minutos y combina el falso documental con el Pietaje Encontrado. En ella conocemos a un grupo de cineastas que decide registrar la vida diaria de Min, la shaman de una población que venera a Bayan, un dios que ha poseído a las mujeres de la familia de Min durante generaciones. Cuando su joven sobrina Ming comienza a comportarse de manera extraña, la shaman busca ayuda porque la chica no podría estar poseída por Bayan, sino por algo peor.
Por sencilla que parezca es una trama que encierra cuestiones como superstición contra religión y razonamiento, que aunque no se profundizan sirven para enmarcar la típica pelea entre el bien y el mal. Como se decía, la atmósfera oscura, misteriosa y tétrica, es la que nos mete a ese universo espeluznante.
Desde el inicio sabemos que algo anda mal con Ming, y aunque la principal debilidad de la cinta son esas situaciones perturbadoras pero repetitivas que se dan durante la primera hora, quedan en el olvido cuando llegamos a la confrontación final: Frenética, sacada de una pesadilla. Pisanthanakun se tomó su tiempo (casi una hora) para detonar la trama y aderezarla con maldad, sangre, un toque de canibalismo y un impactante momento de crueldad animal, breve pero no apto para personas sensibles, además de darnos un final macabro.
Aunque la premisa tarda para avanzar y salir de las escenas explicativas y redundantes, la película es el trabajo de un equipo de ensueño; Hong-jin y Pisanthanakun crearon, me atrevo a decir, un futuro clásico de culto.
Sé que las comparaciones son odiosas, pero esta película es lo que "The Old Ways" quiso ser pero se quedó corta en el intento; con su historia llena de clichés y conveniencias, tal vez pudo ser mejor si la hubieran realizado gente que entendiera la esencia del misticismo y las tradiciones culturales mostradas.
Como decía al principio, una cinta puede ganarse una reputación dudosa, puede o no causar miedo, pero la experiencia vivida al verla siempre perdurará. En este caso, tal vez sea recomendable ver "The Medium" acompañado, mínimo para tener alguien con quien platicar y así quitarse la incómoda sensación que deja cuando empiezan los créditos finales.
Si llegaron hasta aquí. gracias por leer.
💀😈📹
