Reseña: El exorcismo de Carmen Farías 2021 (CON SPOILERS) - Horror Hazard

Agosto 16, 2021



"El exorcismo de Carmen Farías" (México, 2021). Dirigida por Rodrigo Fiallela

Protagonistas: Camila Sodi, Juan Pablo Castañeda, Juan Carlos Colombo.

Calificación: (1/2 estrella)



Trailer


El cine de terror es un género de contrastes en México: Sus películas generan ingresos en taquilla, pero en cuanto contenido casi siempre terminan decepcionando. "Kilómetro 31 (2006), "Morgana" (2012) y Visitantes" (2014) son ejemplos de ello; falsos sustos, Jump Scares poco eficientes, recursos reciclados, refriteo de clichés... El terror mexicano ha sido castigado por la crítica especializada y en pocas ocasiones es tomado en serio. Con sus excepciones, por lo general cae en la comedia involuntaria y parece que sus realizadores creen que con una historia de fantasmas o demonios y escenas rematadas con un golpe musical ya están haciendo una película "de miedo". Carlos Enrique Taboada (1929-1997) es reconocido como el máximo exponente del cine de terror mexicano, ¿Cómo reaccionaría si viera una película de las mencionadas, pero en particular "El exorcismo de Carmen Farías"? Admito que entré a verla con un poco de resignación; no esperaba mucho pero tampoco algo tan atroz. Tristemente, este filme se une a la lista de cintas mexicanas que quieren dar miedo pero se quedan cortas en el intento. Camila Sodi interpreta al personaje mencionado en el título, quien de acuerdo a la sinopsis oficial es una "intrépida periodista" que hereda la casa de su abuela y al mudarse es amenazada por una presencia sobrenatural..



La fotografía y el diseño de producción es quizá lo único rescatable de la cinta. La cámara nos muestra ángulos peculiares, paneos y uno que otro movimiento interesante, aunque en ocasiones resultan confusos y su lenguaje cinematográfico no transmite nada, mientras que las locaciones, ubicadas en los denominados pueblos mágicos de El Oro, Estado de México, donde se encuentra la casona que sirvió en la filmación, y Tlalpujahua, Michoacán, ayudan a transmitir la sensación de aislamiento.


De ahí en fuera la película se convierte en una serie de errores argumentales, una edición sin ritmo y pirateadas de clásicos que ni a homenaje llegan. ¿O van a decir que no se acordaron de "El Resplandor" (Stanley Kubrick, 1980) en la secuencia del inicio? ¿O que la cuna no es semejante a la de "El bebé de Rosemary" de Roman Polanski?



Carmen Farías dice ser periodista simplemente porque la vemos quejarse con su esposo, ya no digamos con su editor, que uno de sus escritos (no se menciona si es nota, artículo, columna o reportaje, que yo recuerde) no se publicó por completo. En ningún momento se le ve en el "chacaleo" (entrevistas improvisadas), reportando en vivo o haciendo preguntas incómodas. Y cuando llega el momento de demostrar que es periodista hace unas preguntas que ni un estudiante de primer semestre de Comunicación haría. Todo eso no es culpa de Sodi... Ok, en parte sí por su actuación tan desangelada, pero todo recae en el guión. Su profesión era el pretexto para poner al personaje en conflicto porque podría ser escéptica al sólo creer en los hechos y una situación paranormal le haría cuestionarse a ella misma, pero todo queda en un personaje unidimensional y que se espanta hasta porque vuela la mosca.


Como no hay desarrollo de personajes ni éstos tienen profundidad, todo lo quieren arreglar con diálogos explicativos y  recurriendo al recurso del Pietaje encontrado, es decir, Carmen halla videos donde se le ve levitando cuando de niña fue poseída, ¿por qué o por quién? Nunca lo explican y eso termina frustrando al espectador.



De los sustos ni hablar porque para empezar no hay. Un Jump Scare es una mezcla de elementos trabajados, no solamente es silencio rematado con un ruido fuerte o música a alto volumen, y en esta cinta ese tipo de "sustos" abundan. Cuando hay oportunidad de causar horror al espectador en la escena donde ella encuentra a su perrita muerta el director decide usar una toma fija de ella cayendo de rodillas, llevarse las manos a la cara llorando para luego verla vomitando, una de las incontables ocasiones que la vemos en esa situación.



En resumen "El exorcismo de Carmen Farías" no da miedo, es aburrida, lenta y sus sustos son tan falsos como un billete de Turista Mundial. Películas como esta le dan un mal nombre al terror mexicano y eso es una lástima porque hay cintas como "Belzebuth" (Emilio Portes, 2017) y "Vuelven" (Issa López, 2017; cinta que fue alabada por el mismísimo Stephen King), que muchos no van a verlas porque creen son bodrios risibles cuando no es así. Hasta "El incidente" (2014)  y "Los similares" (2015) ambas dirigidas por Isaac Ezban tampoco dan miedo y también caen en el humor involuntario (al menos a mí no me gustaron), pero por lo menos se les reconoce el intento de hacer algo diferente y tratar de innovar en un género que ha sido ridiculizado, que es objeto de burlas y considerado superficial cuando no lo es. Incluso "Vacaciones de terror" (René Cardona III, 1989) es un clásico de culto por lo barato de sus efectos visuales y actuaciones delirantes, pero siempre defenderé que su historia no le pide nada a cualquier película hollywoodense.



Una BUENA cinta de terror no sólo cuestiona el concepto del bien y el mal, también desafía nuestras creencias y pone a prueba nuestros límites. "El exorcismo de Carmen Farías" no se esfuerza en hacerlo porque al parecer sus realizadores creyeron que con música "tenebrosa", sustos baratos y reciclando clichés ya estaban haciendo una cinta de miedo.

El recuerdo de haber visto esta película me atormentará por mucho tiempo, espero poder exorcizarlo.


Si llegaron hasta aquí gracias por leer.  🤢😈🤮✝



¿Qué secretos guardará la abuela? ¡Descúbrelo aquí!


Review: The Exorcism of Carmen Farías 

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