12/8/2020
El cine griego cada vez se torna más interesante pues va afianzando un estilo propio y distintivo del producido en otras latitudes. Un ejemplo claro es precisamente Minos Nikolakakis, director de Entwined, que logra trasladar a la gran pantalla una historia oscura de amor, comprometida y perturbadora a la vez, donde la mezcla de mitos y leyendas griegas es la regla.
Nikolakakis nació en Atenas y tiene una maestría en ingeniería civil de la Universidad de Patras. Sus trabajos como director incluyen los cortometrajes Ticket to Ride, The Present, Marionette, The Happy Life y The Attic. Entwined es su primer largometraje.
Sinopsis
Panos, un médico de ciudad tiene que trasladarse a una aldea remota para ofrecer sus servicios a la comunidad, aunque no se sentirá inmediatamente bienvenido por los lugareños. Cuando ve a Danae, Panos se enamora perdidamente de ella. Danae vive aislada, lejos de la aldea, y tiene una condición misteriosa en la piel. Determinado a curarla, Panos pronto descubrirá que Danae no es la princesa indefensa que él pensó que era, y que el tiempo es esencial para ambos.
Esta película fue escrita por Nikolakakis en coautoría con John de Holland y protagonizada por Prometheus Aleifer, Anastasia Rafaella Konidi, John De Holland y Maria Eglezaki. La música de Sotiris Debonos mezcla con creatividad la nostalgia y lo sugestivo con lo amenazador y recóndito.
Su estreno fue el 08 de setiembre del 2019 en el Toronto International Film Festival y en Brasil fue el pasado 27 de julio en el Fantaspoa - International Fantastic Film Festival. Estará en cines el próximo 28 de agosto y su lanzamiento en disco será el 8 de setiembre.
Es producida por Nikolakakis y Lilette Botassi para Inkas Film Productions (Grecia), con Multivision, Authorwave y Melancholy Star, de Reino Unido. La compañía francesa Stray Dogs gestiona las ventas internacionales.
Filmada en la península del Peloponeso, origen de varios mitos griegos antiguos, Entwined es un cuento de hadas moderno al borde del realismo. Con su quimera sagazmente escondida detrás de lo lógico y sutil, la película nos resuena la predilección humana a no comprender lo que se percibe y acaece ante nuestros sentidos.
Nikolakakis hace una fenomenal mezcla del folclore y mitología griega, dándole una perspectiva moderna para crear una historia en la que Eros y Thanatos se dan la mano, en lugar de ser los naturales opuestos: “Dios marca a los malignos para que podamos saber quiénes son”.
La crítica la detalla como una película de terror de autor donde el bosque es el actor oculto que desempeña un papel preponderante. Las ramas de los árboles, el pasto y la vegetación, alcanzan una proporción amenazante, todo por el gran trabajo del director de fotografía Thodoros Mihopoulos. Se trata de un regalo de un maestro que, una vez que lo recibimos, no sabremos qué hacer ni cómo jugar con él.
Los tres actores principales realizan un trabajo destacable, pero Konidi matiza en su papel de Danae, pues construye un personaje efímero pero que su presencia en el filme siempre está presente pues a como puede adoptar la forma de un ser mitológico puede ser un fantasma.
La película promete una mirada poco común a una leyenda que se enfoca en Panos, el médico, que conoce a una joven princesa que vive en el bosque. Él es como un príncipe azul para ella y no tiene ninguna intención de dejarlo ir. Veremos el dilema de este médico con lo que Danae tiene para ofrecerle y claramente no tiene idea de cómo manejarlo.
Una cinta destacable donde el aislamiento y el amor, ambos a su manera, pueden dañar a un ser humano. Con esa premisa les invito a disfrutarla.
